Hace unos días publicaba un post en el que criticaba algunas cosas de un artículo aparecido en el suplemento sabatino de El País. Los directores creativos de la empresa que ha lanzado ese vino, Jo!, Carlitos y Patricia (a la izquierda con su tarjeta de presentación), han tenido la amabilidad de poner un comentario al post, que todos habéis podido leer. Me apetece contestarles con otro post. Sobre su sorpresa ante la participación del respetable público lector, poco diré, sólo que me sorprende que se sorprendan. Ellos saben, seguro (¡tienen uno!), que esto de los blogs es algo bien vivo y activo.No me gusta leer su afirmación de que "ni se pagó...al periodista, ni se le llevó...ni se le regaló una caja de vino ni se le conoce personalmente". Porque yo no he dicho eso en ningún momento y porque entiendo que el vino lo habrá probado antes de escribir esa página, ¿no? Y entiendo, además (si vuelvo a leer el Libro de Estilo de su periódico), que las comillas tienen que responder a la reproducción de frases textuales. Los dueños del vino, con los que trabajáis, tendrán que conocer al periodista, por lo menos. Y, es una suposición, vosotros también...
De lo que comentó en su momento arrozconbacalao opinará él, pero con el fondo que subyace a la parte central de vuestro comentario, discrepo. Que las cosas sean diferentes a las que se venían haciendo, no les otorga ningún valor intrínseco, así de entrada. Que las cosas sean nuevas, sin más, tampoco. Diferencia, vanguardia, alteridad pueden ser muy buenas o muy malas, o lo que sea, pero per se no son nada. La historia de cualquier arte que en el mundo ha sido demuestra que hay un montón de "cadáveres" sacrificados en la pira de lo moderno y lo diferente. En el mundo del vino iría un poco más lejos: parece intuirse, en variadas zonas vinícolas del mundo, que lo mejor asociado con lo más nuevo (es decir, lo más reciente), es, paradoja, aquello que vuelve a los orígenes.


"JO! tiene vocación de salir del reducido círculo de connoisseurs que acaparan el mundo del vino": creo con sinceridad que quienes acaparan el mundo del vino son sus consumidores. Y eso está muy bien. Yo, por lo demás, no me considero ni acaparador de nada que no sean buenas botellas (y jamás paso de las 80), ni connaisseur. En esto del vino, cada día descubro y aprendo cosas nuevas, tengo sorpresas, descubro diferencias...eso sí, sin "coJo!nes", sólo con narices...
"Cuestionad los estereotipos que dicen que...todos los vinos tienen que hablar bajito y solamente de las excelencias de la uva y de la tierra": ¿de dónde habéis sacado esto? El estereotipo, bien al contrario, dice en este caso y desde hace bastantes años, que los vinos chillan más que hablan, en levaduras, en extracciones, en maderas...Por lo demás, si un vino que es considerado bueno por quien lo produce y por quien lo intenta vender, no habla de las excelencias de la uva con que está hecho y de la tierra que lo ha visto crecer, ¿de qué va a hablar?
Prometo no escribir más sobre esto. Termino diciendo que creo, como simple público al que no gusta que le "cuelen mierda envuelta en papel de regalo", que habéis hecho un buen trabajo en la parte que os corresponde en este asunto y que, ahora ya para bien o para mal, le toca hablar al vino. Por supuesto, le daremos esa oportunidad.
"Cuestionad los estereotipos que dicen que...todos los vinos tienen que hablar bajito y solamente de las excelencias de la uva y de la tierra": ¿de dónde habéis sacado esto? El estereotipo, bien al contrario, dice en este caso y desde hace bastantes años, que los vinos chillan más que hablan, en levaduras, en extracciones, en maderas...Por lo demás, si un vino que es considerado bueno por quien lo produce y por quien lo intenta vender, no habla de las excelencias de la uva con que está hecho y de la tierra que lo ha visto crecer, ¿de qué va a hablar?
Prometo no escribir más sobre esto. Termino diciendo que creo, como simple público al que no gusta que le "cuelen mierda envuelta en papel de regalo", que habéis hecho un buen trabajo en la parte que os corresponde en este asunto y que, ahora ya para bien o para mal, le toca hablar al vino. Por supuesto, le daremos esa oportunidad.
Postscriptum. Sigo la sugerencia de los creadores de la comunicación y del proceso de mercadotecnia del vino Jo!, aunque más que sustituir (ellos mismos firmaron con esa identidad su primera intervención), añado una referencia a ese animal que nos tiene las papilas gustativas robadas (la pituitaria es ya otra cosa...). La imagen procede de su página web.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada
Be patient, my friend!