16 de juny, 2008

Vinos naturales: el ejemplo de Samuel Cano


Hace bien pocos días hablaba de las características de los vinos naturales, que la asociación de sus productores ha decidido otorgarse. Y, será por casualidad o no (¡cada vez creo menos en ellas!), pero la semana pasada la asociación me hizo llegar la publicidad de su primer encuentro. Por desgracia, la cita cae un poco lejos de casa, pero aquí os la dejo porque merece la pena que la conozcáis los interesados en el mundo del vino. Será el próximo 23 de junio, vigilia de San Juan, en pleno corazón de La Mancha y de su DO, en El Toboso. En el restaurante del mismo nombre y de 10 a 19 horas, 11 ilustres bodegueros y productores de vinos naturales darán carta de naturaleza a su asociación, y se reunirán en su primer salón, no tanto para conocerse entre sí, que también, cuanto para darse a conocer a todos los que por allí os acerquéis. Mi pena es doble y la hago pública, porque casi no me creo mi desgracia: por razones familiares, tengo que estar en la zona (en La Roda, Albacete), los días 21 y 22 de junio, pero tengo que volver ese mismo 22 por la noche. Sic!!! Apenas 80 km separan La Roda de El Toboso...Sin comentarios.

Para intentar resarcirme de tamaño despropósito (mi otra desgracia es que Las Rejas de Manuel de la Osa anda de reposo vacacional precisamente esos días de junio: ¡es que no doy ni una! ¿Algún sabio consejo de los amigos en la zona?), me he apañado hoy un surtido de verduras de temporada a la plancha (berenjena, calabacín, con cebollas, nada más), sal gorda de Maldon, un chorretón de aceite, y me he abierto la botella que Samuel Cano tuvo la amabilidad de mandarme. Samuel vive en Mota del Cuervo (Cuenca) y sus viñedos se encuentran en la DO La Mancha. Supe de él gracias a Mario, que cantaba maravillas de su El Patio 2006 (decía Mario que "por amistad"; y yo pensé que me apetecería comprobarlo). Al leer que Samuel (El Toboso está casi a tiro de piedra de su bodega) formaba parte del cartel de elaboradores de este 23 de junio, miré la botella y pensé "hoy serás mía". Recomiendo abrirla una hora antes del servicio, hacerlo sobre los 15 ºC y permitir que suba de temperatura el vino en copa un par de grados más. Se trata de un experimento valiente y arriesgado: quasi-monovarietal de syrah (con algo de cabernet sauvignon), la uva de la primera vinificación de Samuel ha sido vendimiada y despalillada (sic!) a mano. Detalle importante para entender sobre todo su paso por boca, es que entre maceración prefermentativa, fermentación y maceración, el vino ha pasado 30 días en las mismas barricas (roble americano de cuarto año) que después le han dado el afinado (sobre los 8 meses), primero en posición vertical y como si de depósitos se tratara. Después en posición horizontal. No hay filtrado y sólo un clarificado po clara de huevo. Embotellado en junio de 2007, sale al mercado con 13%.

Su color es de un rubí intenso, casi encendido, subido y brillante, con un menisco de capa media y un ribete en degradado del mismo tono. Los aromas de fruta que asoman, agradan por su comedida austeridad : aires de ciruela madura y aceitunas negras muertas, acompañados del humo del hogar, llevan a una boca ligeramente astringente. Asoman posgustos de hollejos, una largueza de sabores muy notable y una pizca de regaliz de palo. Los taninos son medios, agradables y algo secantes. Tiene una lágrima notable este vino y te deja la sensación de vino austero, ligero y comedido, que termina su recorrido con aromas de campo en otoño: me vienen a la cabeza los aromas y la nobleza del sarmiento. No sé a qué precio estará en el mercado pero se trata de un primer vino muy notable y que me reafirma en la idea de que a los productores de los vinos naturales, hay que seguirles con dedicación y con ganas de probar cuanto hacen. Vaya que sí.

Postscriptum. Como sucede casi siempre, he hecho la cata a mediodía, en ayunas y antes de comer, y he reservado una parte de la botella para tomar con alimentos sólidos, horas después de abierta (esas verduras...). Ha ganado mucho, de veras, y se han añadido a las notas tomadas, un deje de cerezas maduras, junto con aromas terciarios de pimienta de cayena y clavo de especia. El recuerdo que deja el vino es cada vez más agradable, de fácil entrada pero buena complejidad al mismo tiempo y un claro consejo, que no seguí en su momento: casi es mejor decantarlo una hora antes que dejar simplemente la botella abierta (lo que yo hice).

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada

Be patient, my friend!

Kagami y Rita

Escribo este texto el domingo 12 de mayo de 2019. No sé cuándo lo publicaré (al final, ha sido el 8 de diciembre de 2025, sic) pero quiero d...